«Dime algo con amor…»
«Amorfa»
Parece chiste pero es anécdota…
Este chiste siempre me ha hecho mucha gracia y últimamente me rondaba y no sabía por qué… hasta que me ha hecho reflexionar sobre algo…
Siento que refleja cómo nos hablamos a nosotros mismos… Cabría esperar algo de amabilidad, aprecio, aceptación… pero, mientras esperamos una palabra de amor, lo que recibimos es «amorfa» o cualquier otra mierda similar…
Por eso digo que, lo que parece chiste, realmente es anécdota… y, si no, piénsalo… ¿Cuántas veces te has dicho cosas peores?
Así que te propongo un ejercicio algo tonto pero efectivo: la próxima vez que veas que te estás hablando mal o incluso siendo algo despiadada/o contigo, acuérdate de este chiste… Y observa qué pasa…
Apuesto a que, por lo menos, te da algo de perspectiva…
¿Conocías este chiste? 😆
